UVC es una forma de onda magnética, y como todas las configuraciones de onda que emanan del sol, sus propiedades son únicas para cada una de sus frecuencias. Esta parte “C” de la familia de UV tiene efectos germicidas, especialmente en la frecuencia de 260 nanómetros. Cuando el mercurio se vaporiza en un plasma de baja presión, la línea de espectro más prominente es la de 253.7 nanómetros, muy próxima a la línea de 260 nm. La División de Iluminación de la Compañía Westinghouse fue la primera en comercializar la lámpara de vapor de mercurio a baja presión a principio de los años 30.

En el más simple de los términos, un micro-organismo ADN es el objetivo de la onda de 253.7 nm. de longitud.
Esta onda destruye el ADN causando la muerte de la célula  o haciendo imposible su reproducción (división de la célula). Mas allá de lo expuesto, la UVC puede degradar materia orgánica simple a nivel molecular.

Si, miles de referencias sobre su eficacia pueden ser encontradas en la literatura específica y en aplicaciones reales. La literatura mas reciente es la suministrada por Steril-Aire, la cual se incluye en sus folletos y catálogos mas actualizados. Una de estas referencias es la  Ampliación del Extracto realizada por el NIOSH (National Institute for Occupational Safety and Health) en colaboración con la Universidad de Cincinnati donde la UVC fue ensayada contra lo más profundo del corazón de la bacteria. Junto con este ensayo, está el estudio de la Universidad de Tulsa, llevado a cabo por la Compañía de Servicio Público de Oklahoma donde se obtuvo, con los Emisores UVC y en doble registro, una reducción de hongos superficiales y suspendidos en el aire del  99%. La energía UVC se utiliza en todo el mundo, con mayor profusión en otros países distintos a los EE.UU. Su aplicación mas extendida se encuentra en el campo de la desinfección de agua.

Las letras UV se relacionan con el espectro ultravioleta completo. Este espectro se divide en una gama de cuatro frecuencias: Vacío, Onda Corta, Onda Media y Onda Larga ó expresado de otra forma: VUV, UVC, UVB & UVA. UVC es la frecuencia más germicida y el término UVGI se refiere a la Irradiación Germicida Ultravioleta tal como la utilizan algunas  Agencias Federales de EE.UU., tales como OSHA (Occupational Safety and Health Act ), NIOSH (National Institute for Occupational Safety and Health) y los CDC (Centers for Disease Control), al referirse de forma directa a UVC.

Las alergias relacionadas con los biaerosoles han mostrado abatimiento y remisión completa en aquellos casos donde las lámparas UVC han sido instaladas en Sistemas de Aire. Ha sido comprobado que incluso una simple congestión de nariz puede eliminarse con facilidad.

No. Muchos equipos de UVC del mercado si producen ozono, pero por supuesto los equipos de Steril-Aire no. Un compuesto especial asociado con cuarzo atenúa todas las frecuencias inferiores a 200 nm, eliminando de esta forma la producción de ozono.

No, las lámparas UVC son un componente más de los sistemas de aire, esto es, un añadido a otras partes del sistema. Estas son la batería de intercambio térmico, el equipo de calefacción, el ventilador, las compuertas de regulación, los humectadores, los filtros, etc. Todos estos componentes están diseñados para realizar algún tipo de trabajo en el interior de la Unidad de Tratamiento de Aire ó en el aire.

Sí, en una aplicación de enfermedad contagiosa la eficiencia y la ubicación de los filtros deberían ser muy tenidos en cuenta. El objetivo de un filtro es el de suministrar una reducción en el número total de microbios y con TB la idea es la de aproximarse o alcanzar su total eliminación. Para ello, y para un microbio determinado, el efecto del filtro es una parte necesaria en los cálculos para determinar la concentración resultante por unidad de volumen. Sin embargo, y dado que los virus pueden ser tan pequeños como de 0.02 micras, el organismo en estudio debe ser conocido para estimar un resultado predecible. Llegados a este punto, lo más importante sin embargo, es que los filtros de aire no eliminan el crecimiento microbiano en las baterías de intercambio térmico, en las bandejas de condensación ó en plenums y conductos de aire.

Para Calidad del Aire Interior (CAI), mejora de transmisión de calor en baterías, reducción de mantenimiento y de olores, la aplicación patentada de Steril-Aire requiere aproximadamente, un total de 3 Lámparas UVC de 600 mm de longitud por cada metro cuadrado de superficie frontal  de batería de intercambio térmico. Steril-Aire deberá ser consultada siempre para la selección relativa a todas y cada una de las aplicaciones relacionadas con enfermedades contagiosas.

No, se dispone de instrucciones de montaje para cada modelo y dibujos en CAD en los casos en los que se nos informe de las dimensiones específicas. Dependiendo del tamaño y tipo de la lámpara en cuestión, el tiempo de montaje es de 15 a 20 minutos por lámpara. Steril-Aire debe ser consultada siempre que se trate de una aplicación para enfermedades contagiosas.

Las lámparas ó emisores UVC de Steril-Aire han sido específicamente diseñadas para su aplicación en Sistemas de Aire. En sistemas existentes, las infecciones están siempre presentes, y por tanto, los mejores resultados son obtenidos cuando las lámparas son montadas aguas debajo de la batería y enfrentadas a la misma. En esta ubicación, el usuario puede esperar la mayor eficacia en la eliminación de los microbios, tanto en superficies (batería y plenum), como en la bandeja de condensación y aquellos suspendidos en el aire. En instalaciones nuevas, las lámparas UVC pueden instalarse aguas arriba y aguas debajo de la batería y enfrentadas a la misma.

Los resultados son mucho más dramáticos si no se limpia la batería pero realmente es una cuestión de tiempo. Las lámparas UVC degradarán toda la materia orgánica sobre y alrededor de la batería en un periodo de tiempo relativo a la aplicación, pero usualmente de 30 días o menos. La profundidad de la batería (número de filas), la distancia entre aletas y el tipo y cantidad de contaminación son todos ellos factores determinantes. Conociendo estos factores y con lo que las lámparas UVC de Steril-Aire harán, la limpieza previa podrá solamente acelerar el proceso.

Existen varias formas para demostrar la gran cantidad de cosas que están teniendo lugar. Una de ellas es la de utilizar placas de contacto conteniendo agar de malta como medio de cultivo. Antes de instalar las lámparas, la superficie de la batería es frotada ligeramente, permitiendo un tiempo de incubación de la placa de 96 horas, aproximadamente. Después de instalar las lámparas UVC, se realiza un procedimiento similar en el mismo lugar. Lo que se observará es una reducción del 98%+ en la actividad de organismos. La misma operación puede repetirse para la bandeja de condensación y otros medios de cultivo diferentes pueden ser utilizados en el conteo de bacterias.

Otros formas de demostración son: *Una visible reducción de hongos puede ser vista en un corto periodo de tiempo, *La pérdida de carga (lado aire) se reducirá pudiendo caer un porcentaje del 30% en 30 días ó menos (dependiendo del grado de limpieza de la bacteria y de la actividad acuosa (grado de condensación de la batería); por supuesto, y como resultado,  los caudales de aire de los sistemas se ven normalmente incrementados. *Las bandejas de condensación y el agua en estas bandejas se ven más limpias de forma significativa. *Todas las superficies en línea, por ejemplo el aislamiento interior, comenzarán a presentarse como componentes recién instalados. *La mayor cantidad de olores en los espacios ocupados desaparecerán y el aire parecerá más fresco. *Muchas de las quejas relativas a una pobre calidad del aire interior cesarán en un tiempo máximo de 24 horas.

No, UVC no tiene la fuerza de penetración de UV-A & UV-B. Pero una exposición prolongada puede hacer que la piel se enrojezca superficialmente y que los ojos sientan como si tuvieran arena en ellos. Estos efectos desaparecen usualmente en 24 o 30 horas y no existe ningún daño duradero. Si se toman las precauciones pertinentes, se eliminan estos inconvenientes menores.

Sí. Todos los equipos de Steril-Aire están listados tanto en la CSA (Canadian Standards Association) como en UL (Underwriters Laboratories), y presentan la etiqueta verde (green label) para ambientes húmedos.

Las luminarias se garantizan durante 1 año y las lámparas UVC durante 90 días.

De forma distinta a las lámparas UVC convencionales, los Emisores UVC de Steril-Aire están diseñados para su funcionamiento en Sistemas de Acondicionamiento de Aire. Generan una mayor potencia en ambientes hostiles al tiempo que consumen menos energía que los productos convencionales trabajando en condiciones ideales. De forma esencial, los Emisores UVC de Steril-Aire no tiene límites en los equipos para Sistemas de Aire, ya que fueron originalmente diseñados para este uso específico. Como regla práctica, los límites de empleo son: temperaturas de 0 á 77ºC; humedad relativa del 99% y velocidad del aire de 5 m/s respectivamente. En las aplicaciones que excedan estos límites, se recomienda la consulta a Steril-Aire.

Los pequeños usuarios se desprenderán de los tubos usados como harían con cualquier resto de vidrio. Los usuarios de grandes cantidades de lámparas fluorescentes siguen las normas establecidas por las Autoridades competentes y los productos de Steril-Aire están considerados como no peligrosos ó como residuos peligrosos, dependiendo del país ó región.

Los grandes edificios deberían tener un programa activo para lámparas fluorescentes que incluyera simplemente las lámparas germicidas.

Tomando todos los factores en consideración, la mejor solución es la de permitir que las lámparas funcionen de forma continua. Cuando tanto el rendimiento y la vida útil de la lámpara y de  la unidad de potencia son tomadas en consideración, estos componentes funcionan mejor y durante más largo tiempo cuando lo hacen de forma continua. Así que siempre que sea posible, permítase que funcionen continuamente.

Para aplicaciones con enfermedades contagiosas, la reposición de las lámparas deberá realizarse utilizando un radiómetro y siguiendo las especificaciones de Fábrica. Para aplicaciones de mejora de la CAI ó de control de hongos, las grandes instalaciones pueden beneficiarse con la instalación de un radiómetro para evitar reposiciones prematuras. Cambiar las lámparas de estas grandes instalaciones cuando su potencia decrece en un 40% es práctica habitual, y esto usualmente ocurre  en aproximadamente 12 meses. En instalaciones sin radiómetro, cambiar las lámparas una vez al año.

Las lámparas UVC convencionales precisan de limpieza rutinaria para obtener un máximo rendimiento. Los Emisores UVC de Steril-Aire producen tal cantidad de potencia que degradan cualquier material que se acumula, y por tanto nunca se precisa de una limpieza periódica. Inténtese limpiar una lámpara comercial usada como criterio personal.

La limpieza podría ser necesaria si se ha tocado el cuarzo, etc. Utilizar mejor alcohol puro (99%) y un paño libre de hilachos, o utilice el juego de limpieza de Steril-Aire.

La metodología de aplicación de Steril-Aire para que las lámparas se instalen aguas debajo de los filtros y de la batería y la utilización de la batería ayudan a eliminar este problema. En este punto, una gran cantidad de polvo es extraída permitiendo que el objetivo quede al descubierto. También, las lámparas UVC son enfocadas y reflejadas cientos de millones de veces por centímetro cuadrado, por todas partes de la batería, incrementando la densidad de flujo (número de fotones) entre las aletas. Según el microbio entra y pasa a través de la batería sale girándose o se girará permitiendo que la energía global de 360º le amartille de forma constante.

Esta es la razón por la cual una instalación para mejora de la CAI puede suministrar un alto poder de aniquilación (kill rate) en un simple paso y para la mayoría de los microbios en suspensión en el aire. También es el porqué eliminamos los hongos y degradamos toda la materia orgánica en el interior de la batería. En instalaciones de enfermedades contagiosas, los filtros de aire de calidad superior a 65% Dust Spot son empleados de forma que no existan demasiados microbios que pasen a través, continúen adheridos a las partículas de polvo. En el momento que el organismo se libere (se desprenda), está libre para absorber toda la energía UVC disponible, consiguiéndose por tanto, un mayor potencial de aniquilación (kill ratio). Lo que es más, los diseños de Steril-Aire para enfermedades contagiosas son estudiados son un 150% de la energía de cálculo. Nos complace informar que todos los diseños de este tipo y hasta la fecha no han presentado conversiones a TB activa.

Las pequeñas dosis de energía UVC puede que no causen la muerte inmediata de la célula pero el microbio puede estar “desactivado”. Esto significa que la función biológica de algún tipo puede todavía existir pero su reproducción es imposible de tal forma que el organismo no sea viable. ¡ Simplemente, el organismo no puede multiplicarse y convirtiéndose en inofensivo! Las pequeñas dosis sin embargo, aceleran la muerte de la célula.

Un porcentaje superior al 90% de la energía generada por el Emisor de Steril-Aire es energía UVC. El resto es algo de luz visible (de tono azulado) y una pequeña cantidad de calor (infrarrojo). Dado el brillo de este “3-4% de luz visible” nos da alguna idea de la cantidad de energía UVC que los productos de Steril-Aire generan.

No necesariamente, el color azul viene de un gas inerte en el interior de la lámpara y no es debido a la energía UVC producida. El tubo puede estar encendido (y el tono azul presente) y todavía no producir alguna energía UVC en absoluto.

No existe evidencia que las dosis de UVC anti-microbios mate a los ácaros del polvo. Quizá una mayor cantidad de energía los mataría; sin embargo, tampoco existe alguna evidencia que demuestre que los ácaros habitan en los conductos de aire.

Ha sido mostrado que los microbios capturados por un filtro tratado contra microbios han perecido pero también existen muchos años de evidencia que muestra que los microbios capturados por filtros no tratados también han perecido. ¿ Es una excepción la hipótesis de que algunos hongos en filtros humedecidos se caracterizan por el olor? Sin embargo, nada de esto excluye los años de evidencia de que los conteos microbianos son siempre inferiores aguas abajo del filtro. Tampoco se refiere  en modo alguno al crecimiento de microorganismos en la batería ni en la bandeja de condensación, lo cual conduce a un eventual aumento de materia orgánica. En  este último y otros  temas de mayor importancia  es donde UVC ofrece la única fuente continua de control.

El sembrado continuo en conductos debido a la enorme actividad dentro de la batería de intercambio térmico, exacerba la actividad de los hongos en los conductos de aire. Dado que la actividad de los hongos se auto-limita, la eliminación de su fuente reducirá de forma significativa la actividad de los hongos en cualquier otra parte. La aplicación de UVC en la batería reduce drásticamente la actividad global  en el resto del sistema de aire así como en los espacios ocupados. Existe evidencia científica sobre esto de los Doctores Richard Shaughnessy y Estela Leviten, de la Universidad de Tulsa.

Si, el seguimiento de la metodología de Steril-Aire degrada el crecimiento orgánico en las baterías con dos resultados eventuales:

1.La pérdida de carga a través de la batería disminuye hasta la situación de “recién instalada”, ó como media algo similar al 22% para una batería instalada 5 años atrás.
2.La temperatura húmeda media de salida de batería disminuye de forma significativa.
Los ahorros energéticos se consiguen por tanto a través de la capacidad incrementada , menor potencia absorbida en el lado del aire (y/ó caudal de aire más alto) y/ó tiempo de funcionamiento más reducido, incluyendo la unidad condensadora.

Las reducciones y los aumentos siempre se manifiestan por ellos mismos en alguna definitiva de energía ahorrando trabajo. La utilización del programa “Life Cycle Cost” de Steril-Aire es una excelente forma de demostrar estos ahorros.

Artículo especializados publicados documentan reducciones del 30 al 50% en la eficiencia de intercambio de calor agua-aire en baterías por razón de la acumulación de materia orgánica en estas últimas. Asimismo, las cantidades ingentes de productos químicos de limpieza de baterías y de máquinas junto con un buen número de fabricantes de “baterías de reposición” confirman la prevalencia del problema. Brian Krafthfter de Honeywell es el autor de  lo mejor publicado sobre este área, al igual que está comprometida Steril-Aire con el análisis de casos reales.

Aún una tenue presentación visual requiere millones de microorganismos por centímetro cuadrado de la superficie frontal de la batería y mucho de lo que se pensaba que era simple polvo son usualmente micro-nutrientes cargados de hongos. Así mismo, una gran cantidad de nutriente y de actividad fungal se manifiesta en mayor cantidad en las partes interiores de la batería de intercambio térmico que en las partes visibles de las aletas de aluminio ó cobre. De hecho, algunos de los problemas más notables de la CAI suprimidos con UVC hasta la fecha actual se han puesto de manifiesto en los climas llamados secos donde la actividad microbiana tanto visible como en los bordes frontales y aún el llamado polvo ó barro no eran aparentes.

Las luminarias tipo NEMA 4x (a prueba de agua y corrosión), utilizando tubos germicidas de simple extremidad han sido específicamente diseñadas para su montaje en equipos “roof-top”. De hecho, la alimentación eléctrica deriva del mismo equipo “roof-top” siendo su cableado mucho más sencillo, obviamente. La instalación de lámparas UVC en “roof-tops” no son solo una posibilidad viable, sino también una tarea muy sencilla.

Sí, las unidades terminales de ventilación (unit ventilators), las bombas de calor y las unidades fan-coil, etc. son a menudo las máquinas existentes más sucias, las más ineficientes y las más problemáticas en el tratamiento de la Calidad del Aire Interior (CAI). Los tubos de disponibles, de simple extremidad y en longitudes de 400 a 900 mm han sido aplicados de forma exitosa en muchas instalaciones con este tipo de unidades terminales, y según su demanda aumente, Steril-Aire desarrollará tubos mayores, con longitudes hasta 1.250mm para adaptarse a baterías de intercambio térmico de mayores dimensiones.

De forma usual no en aplicaciones de Sistemas de Aire pero lo más importante es la reducción en grandes magnitudes y las UVC son la solución perfecta y en muchos casos la única para realizar el trabajo. ¡Además, el proceso no produce alguna contaminación secundaria!

Normalmente el costo varía entre 16 y 25 Pesetas por m3/h de aire instalado y entre 5 y 6 Pesetas por m3/h instalado, al año en concepto de mantenimiento.

En edificios comerciales, industriales ó institucionales, los costos correspondientes a la pérdida de eficiencia de transmisión de calor de las baterías, la potencia eléctrica en el lado aire, la limpieza de las baterías  y las tabletas ú otros productos químicos de limpieza de bandejas de condensación exceden en 3-4 veces el costo de la instalación de las lámparas UVC. Estas cifras no incluyen los costos de rutina, tiempo de parada de los sistemas, el servicio de atención por quejas, el absentismo y las demandas legales eventuales.

En nuestras casa, nos gastamos entre 6 y 25 veces más dinero en anti-histamínicos, otras medicinas, inyecciones, visitas a médicos y otros gastos similares que con las lámparas UVC, especialmente en el tratamiento a pacientes con alergias graves. Todo esto excluye los costos por ausencias en el trabajo, pérdidas de tiempos de ocio y de compañía ó por pérdidas de eficiencia del sistema, limpieza de conductos, costos de visitas de técnicos de mantenimiento y los de reposición de componentes del sistema. Los tubos de recambio son por supuesto mucho más bajos de costo.

No hay, hoy en día, un sistema suficientemente preciso para dar una respuesta definitiva. Sin embargo, es nuestra intención de tener tal información disponible a corto plazo, si bien la reposición anual de los tubos tiene un gran sentido. El mejor mes del año es el de Abril, de forma de conseguir la máxima potencia de aniquilamiento durante los meses del verano.

Existen publicaciones y prácticos populares que lo encuentran en boga, si bien con vaguedad, lo cual acentúa la mística de una pobre Calidad del Aire Interior (CAI). La investigadora científica que popularizó el término “bio-aerosol” es la Dra. Harriet Burge, trabajando el el momento actual en la Harvard School of Public Health. Tuvimos la ocasión de trabajar con la Dra. Burge en el año 1986, en ocasión de un Seminario sobre CAI en el estado de Maine. Su posición era y todavía es que los bio-aerosoles juegan un mayor papel en el tema sobre la CAI que el que se comúnmente se pensaba.

¡El hecho es que llevaba y lleva razón, y por ello Steril-Aire está hoy en día activamente presente en el mercado de la purificación del aire!

Existen dos razones principales por las cuales encontramos hoy una mayor actividad microbiana que en años pasados.

La primera es la operación programada horaria permitiendo que los sistemas de acondicionamiento de aire no funciones para ahorrar energía. Estas paradas tienen lugar entre 8 y 12 horas por día y de forma usual durante el fin de semana completo. La segunda es el funcionamiento con sistemas de Volumen Variable (VAV). Durante estos períodos de tiempo la batería y la bandeja de condensación están húmedas ó bien mojadas y la temperatura ambiente cerca de la perfección permitiendo un crecimiento acelerado de microbios.

La segunda es el funcionamiento con sistemas de Volumen Variable (VAV). En este caso la temperatura en la batería permanece al punto de diseño (fría) mientras el caudal de aire disminuye. La temperatura de rocío se encuentra presente en todo el plenum de la Unidad de Tratamiento de Aire, produciendo agua de forma casi continua. La habilidad de evaporar algo de la humedad existente en la corriente de aire se ve restringida seriamente. Añádase paradas de sistemas a lo anterior y uno puede visualizar los problemas potenciales.

Las lámparas UVC convencionales se componen de un solo gas y de una gota de mercurio. Para transformar esta gota de mercurio al estado de vapor para producir ó generar UVC, se precisa de una temperatura ambiente específica que permita de forma ideal una temperatura de 40ºC en las paredes del tubo.

Obviamente, el soplado de cualquier aire sobre el tubo, especialmente de aire frío extrae suficiente cantidad de calor como para condensar el mercurio, reduciendo ó eliminando el rendimiento de UVC del tubo germicida. Aquí el truco era el de producir un plasma que no se sintiera afectado por la extracción de calor.

Esto requiere: * Una mezcla de gases nobles especiales y presiones * Un tubo de mayor espesor de pared de cuarzo de la más alta pureza * Filamento tri-espirales y revestimientos  fabricados de forma especial * Y una sin par unidad de potencia para conseguir que todo se aúne.

Sí, todas nuestras opciones de voltage pueden, ya que nuestra unidad de potencia patentada convierte la corriente continua (C/C) en corriente alterna (C/A) y por tanto es independiente de la frecuencia de la línea.

No, todas las luminarias de Steril-Aire, excepto las de construcción NEMA 4x, están diseñadas para una humedad relativa del 100% y funcionan de forma adecuada y predecible bajo estas condiciones; y en sistemas de aire bien diseñados, el agua no debe estar presente.

• El virus gripal se propaga principalmente por las secreciones respiratorias. El lavado frecuente de manos y el evitar contactos cercanos provee una importante medida de protección, pero estas acciones no detienen la propagación de organismos virales que se vuelven aero transportables a través de la tos, estornudo y recirculación a través del sistema HVAC.

• Los productos UVC Steril-Aire emite energía germicida en un espectro ultra violeta con el más alto resultado en la industria – hasta 6 veces el resultado de otros instrumentos -. Esta energía penetra incluso al microbio más pequeño para destruir su ADN y ARN, matándolos o anulándolos. Steril-Aire UVC detiene más del 90% de los virus gripales y otros microbios con cada paso o cambio de aire.

• Existen 4-5 cambios de aire por aire en la mayoría de los edificios comerciales, y hasta 15-20 cambios de aire en instalaciones médicas. Con estos cambios de aire, los equipos UVC reducen el número de microbios a un nivel significativamente menor a lo necesario para infectar a las personas. Por lo tanto, la tecnología UVC ofrece una metodología comprobada y de largo plazo para un mejorado control de infecciones.